Hace unos días mientras veía un documental, «Tokyo Revealed» del Travel Channel del 2002, una estadística que resaltaban fuertemente chocó contra mis neuronas. Se trataba de la cantidad de teléfonos celulares circulando. Con gran asombro, en el estilo de «chúpense esta», el locutor relataba que habían alrededor de 65 millones de teléfonos celulares en circulación para el momento de la nota, lo que equivalía a «más» de la mitad de la población para el 2002. Para el 2002 se estimaban unos 130 millones de habitantes, cosa que comprobé en el Statistics Bureau of Japan, así que es la mitad «no más».

Según la Subsecretaría de Telecomunicaciones, hacia junio del 2005 existían en Chile algo más de 10 millones de teléfonos celulares, lo que equivale a una penetración de mercado de un 62%.

Tres años de retraso y somos mayores consumidores de celulares que un Japón del 2002.