Este viernes a unas cuantas horas de mi última evaluacion y por consiguiente del inicio d emis esperadas vacaciones me encontre con mi polola que estaba de paso por su trabajo (la excusa) en un cafe de concepción. Luego de mi infaltable capuccino (y luego de recordar que los capuccinos “grandes” que sirven alli, realmente son “grandes”) partimos a mi casa. Hacia bastante tiempo que no nos veiamos, as que habi bastante tiempo que recuperar. Bastantes noticias, entre ellas el que el pololo de su hermana por fin encontró trabajo. Eso hace que ya la totalidad de mi circulo de “conocidos” de mi edad estan todos menos uno trabajando. Que fuerte!.

De cocina. Ayer mi polola me enseñó a hacer un pie de limón en menos de 30 minutos. Excelente!, porque soy harto fanatico de los pie de limón.

Aprovechando que lleve a mi mamá al supermercado, compramos lo que necesitabamos, un paquete de galletas de vino, leche condensada, limones, huevos y margarina.

La margarina se mezcla solo con las galletas de vino hechas migas y se vierten en un recipiente enmargarinado previemante mientras ya tengo calentando el horno. Pongo el recipiente en el horno y mientras las yemas de dos huevos se baten junto a la leche condensada y jugo de limón. Saco el recipiente y le vierto la leche condensada preparada con sus agregados, lo dejo reposar y mientras preparo un merengue rapido con las dos claras y azucar. Le agrego el merengue y dejo en el horno solo un par de minutos para dorar el merengue y ya está!. Dejo enfriar y a comer y a preparar otro.